Los motivos utilizados en la pintura mural han sido muy variados y numerosos, desde los clásicos elementos geométricos hasta los que imitaban labores de sillares o ladrillo. Las técnicas utilizadas tradicionalmente en la pintura mural han sido la pintura al temple, al óleo y al fresco.

Muchas son las técnicas para pintar paredes que podemos llevar a cabo a la hora de cambiar el aspecto de nuestros paramentos interiores. Y es que parece mentira lo que una más o menos esmerada mano de pintura puede llegar a hacer por nuestra decoración y diseño interior. 

 

Hay un punto en la carrera de cada artista de la calle y es que cuando él quiere llevar su arte a un nivel superior, simplemente lo hacen, pero  no se pueden ir tan alto, si no tratan sus posibilidades en el campo de la pintura mural. Para estos  talentos tienen que  entrar en la escena de los muralistas de la calle.

 Pintar un mural

Se requiere mucha preparación, equipos y esfuerzo para pintar un mural, ya que es básicamente una obra de arte grande plasmada directamente sobre una pared. Es necesario emplear muchas de las mismas técnicas básicas que las pinturas más pequeñas, pero a mayor escala.  Los murales suelen pintarse por capas y luego se terminan con una capa de barniz que los conserva para que duren por mucho más tiempo.

 

1.  Escoge un lugar adecuado para tu mural: Los artistas suelen pintar murales sobre grandes superficies visibles. La superficie más sencilla para trabajar es una pared plana sin demasiadas obstrucciones. Los pintores dedicados pueden utilizar casi cualquier superficie para trabajar. Algunos pintores prefieren pintar sobre metal corrugado, ladrillos o incluso techos. Una superficie irregular puede darle a tu mural una textura única.

2. Instala andamios o una escalera si no logras alcanzar toda la pared:  En la mayoría de los proyectos de murales, vas a necesitar algún tipo de impulso para alcanzar las áreas altas

3. Limpia la pared con agua y detergente para eliminar las impurezas. Debes revisar la pared para detectar indicios de daños, manchas difíciles y otros problemas que debes tratar antes de comenzar. Mezcla aproximadamente 3 cucharadas de un detergente líquido para ropa o un lavavajillas en un cubo de agua.

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